Se piden más hipotecas para invertir en vivienda que para vivir en ellas, según Asufin

By IDEALISTA «Aumenta la distancia entre quienes se hipotecan para acceder a una primera vivienda y quienes lo hacen como vía de inversión». Así arranca el VI Barómetro de Hipotecas’ que ha publicado la asociación de usuarios financieros Asufin, y que se basa en una encuesta a los consumidores.
Según el documento, el 56% de los consumidores que ha decidido hipotecarse lo hace en una segunda vivienda con propósito de inversión, lo que arroja una subida de 5 puntos respecto al barómetro de la anterior edición.
El estudio también muestra una caída de los consumidores que apuesta por una hipoteca para una segunda residencia para vivir en ella (hasta el 19,1%), con una bajada de 2,7 puntos; así como de quienes buscan hipotecarse para residir de forma principal en la vivienda adquirida, que caen hasta un 25% del total de transacciones.
Los que compran su primera vivienda son el 14,4%, frente al 16% del barómetro anterior, mientras que los que se hipotecan para cambiar su vivienda habitual han descendido nueve décimas, hasta el 10,3%.
Según Asufin, esto es una «muestra clara de cómo un segmento de población muy importante tiene serios problemas de acceso a la vivienda».
Esta idea se reitera en las razones que mueven la contratación de las hipotecas entre las que, de nuevo, destaca la de considerar el inmueble una buena oportunidad de inversión en el 64% de los casos, cinco puntos porcentuales superior al año pasado. Sin embargo, ha experimentado una notable bajada el porcentaje de quienes piensan que se encuentran mejores precios en estos momentos, que pasa del 21% al 9%.
«Estos datos confirman el problema de oferta existente, en tanto que muchos compradores que la necesitan no pueden acceder, lo que tensiona los precios con un parque de vivienda a la venta muy limitado. En paralelo, parte de la que se adquiere como inversión no sale al mercado, o lo hace para usos no habitacionales, como vivienda turística o de alquiler a corto plazo», avisa la agrupación.
En esta línea, cerca del 60% de los encuestados quiere pedir una hipoteca, pero no puede hacerlo por las circunstancias económicas. Asimismo, el 20% considera que la culpa de no poder hacerlo es de tener un salario insuficiente para hacer frente a las cuotas.
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